Discursos del Hon. Manuel L. Quezon, comissionado residente de Filipinas, pronunciados en la Cq́mara de representantes de los Estados Unidos, con motivo de la discusión del Bill Jones, 26, septiembre-14, octubre. 1914.

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dominaban solo en Manila y sus alrededores y en Cavite,
y no estaban autorizadas a avanzar, mientras que en los
extensos distritos restantes los representantes de la otra
potencia reconocida estaban retenidos como prisioneros de
sus abandonados siibditos. Era opinion en Manila durante
este peri'odo ano'malo de nuestras relaciones con los filipinos,
y acaso tambie'n en los Estados Unidos, que el estado de cosas
era abocado a producir algo semejante a la anarqufla. * * *
Puedo, sin embargo, decir sin reservas que Mr. Wilcox y
yo encontramos la situacio'n totalmente diferente de lo que
de ella se opinaba. Durante nuestra ausencia de Manila, viajamos ma's de 600 millas, en un circuito muy extenso, atraves de la parte norte de la Isla de Luzon, cruzando un distrito caracteri'stico e importante. De este modo visitamos
siete provincias, algunas de las cuales estaban bajo el mando
inmediato del gobierno central de Malolos, mnientras otras
estaban situadas a mucha distancia, separadas una de otra
y del asiento del gobierno por divisiones naturales topogra'ficas y s6lo accesibles a costa de un largo y penoso viaje.
Como tributo a la eficiencia del gobierno de Aguinaldo y
al car~cter pacifico de sus siibditos, ofrezco el hecho de que
Mr. Wilcox y yo continuamos nuestro viaje completamente
con perfecta seguridad y volvimos a Manila con los ma's
gratos recuerdos de la vida quieta y ordenada que vimos
AVivfan los naturales bajo el nuevo regimen.
TENDENCIAS PROGRESIVAS DE LA REPPJBLICA FILIPINA.
Sr. Presidente, entre las cosas hechas por este
efi'mero, gobierno, ma's significativas para lo futuro,
porque indican claramente las tendencias de las
fuerzas gubernamentales que funcionaban y lo que
hubiesen hecho por el pueblo filipino si hubieran
durado, son el establecimiento de la instruccio'n piublica libre y obligatoria y la disposicio'n de crear
una universidad del gobierno. L Registra acaso la
historia otro ejemplo de un gobierno recien nacido
que, durante los pocos meses de su existencia y
mientras estaba empefiado auin en una guerra, procediese a tomar medidas para la propagacio'n y desarrollo de la instruccio'n pimblica entre las masas?
Sr. Presidente, el mundo tendra' conocimiento,
cuando las pasiones de los contemporamneos se enfrien, de que nuestra, efi'mera, Repfiblica era, como