Discursos del Hon. Manuel L. Quezon, comissionado residente de Filipinas, pronunciados en la Cq́mara de representantes de los Estados Unidos, con motivo de la discusión del Bill Jones, 26, septiembre-14, octubre. 1914.

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redactar una ley tan lUana y sencilla en menos de
dos afos, teniendo a su disposicion la Oficina del
Fiscal General y otras oficinas de leyes, entonces
esa Comision es culpable de supina incapacidad.
iY sin embargo, el pueblo filipino estuvo bajo la
autoridad exclusiva de tal Comisi6n en lo tocante
a legislacion! Naturalmente, la Comisi6n podia
haber redactado tal proyecto de ley si hubiese querido. El mismo Mr. Worcester es un hombre bien
informado. Hubiera podido escribir una ley semejante en un dia; de todos modos en menos tiempo
que el empleado para escribir su report. iNo es
triste ver que Mr. Worcester haya dejado pasar
una oportunidad para resultar el Lincoln de Filipinas?
Mr. CLINE. Sr. Presidente, Ime permitira una
interrupci6n el caballero?
Sr. PRESIDENTE. 6 Esta conforme el caballero
por Filipinas con lo que pide el caballero de Indiana?
Mr. CLINE. El caballero dice que durante la
filtima sesi6n de la Legislatura Filipina se aprob6
una ley que castiga la esclavitud y el servicio obligatorio.
Sr. QUEZON. Si, seflor; esta ley procedi6 de la
Asamblea Filipina y se aprobo tambien por la Comisi6n cuando no habia mas que un comisionado
americano en las Islas.
Mr. CLINE. Alega, no obstante, el caballero de
Minnesota (Mr. MILLER) que en tres diferentes ocasiones los filipinos tuvieron oportunidad de concurrir con la Comisi6n en estas leyes.
Sr. QUEZON. Si.
Mr. CLINE. Como explica usted el que no lo
hayan hecho asi?
Sr. QUEZON. A eso iba ahora, pero crei que
debia informar antes al Comite acerca de todo el
proceso por que paso esta ley anti-esclavista, de
acuerdo con la narraci6n de Mr. Worcester, al objeto