Historia general de Filipinas desde el descubrimiento de dichas islas hasta nuestras días, por D. José Montero y Vidal ...

HISTORIA DE FILIPINAS'9

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-en la bayoneta de su fusil y es uno de los primeros en
penetrar en el fuerte. Voces de victoria atruenan el es'pacio, y los moros que aimn resistian apelan A~ la fuga.
Posesionados los nuestros del fuerte, extrajeron 70 caAdveres, entre ellos el del famoso datto Udin. De los,expedicionarios bubo 34 muertos y 84 heridos.
El capitain Garnier, con su compafiia, sali6 sin per..
dida de tiempo en persecucio'n de los fugitivos de Asibi,
que pugnaban por entrar en la cotta. Daniel. Confusos
los moros y Ilenos de entusiasmo los soidados, penetran
-revueltos con aque'llos en ei fuerte, arrollan cuanto se
l1es opone al paso, se apoderan de los caiiones y acuchiIlan a' los que hacen resistencia. Los joloanos se aco-.
bardan, y poseildos de espanto se arrojan desde los pa-.
rapetos 'a los manglares, dejando en poder de la tropa
tan importante fortaleza. Recogidos los muertos y transportados los heridos A~ los buques ('), quedaron guarne-.ciendo estas posiciones tres compafilias al mando, del capit~in de granaderos D. Blas Alcuas. El General en jefe
idirigi6' al ejercito una laudatoria orden del dia (2).
(i) El hospital de sangre se estableci6 en la Amistad, cuyo Capitirs
s((ti-abajO6 nuchlisimio y con toda la eficacia y hunmanidad necesarias en
tales casos)), - (Quesada.)
(2) tSoldados: Habd'is merecido bien de la patria y de la Reina con
vuestro valor, apoderAndoos de los fuertes dIe Daniel, corno on antago
de la decisio'n con que mafiana iredis A abatir el pabello'n del Sultin Ma'hamad al grito de;Viva la Reitsa!-Vuestros compafteros del flanco, derecho se os unirAn para tener esta gloria; pero es preciso, para adquirirla, orden, subordinaci6n, decisi()n, y seguir las huellas de vuestros
jefes y oficiales.-Asi pesreciban de los buques los ranchos, cuidarAn los sefiores jefes de columna de so distribucio'n y de que se tomen
todas las disposiciones necesarias para que a] toque de diana puedan formar las columunas de la roanera que se disponga.-Excusado parece re-.~comendar A militares valientes la vigilancia, cuando, es tan sabida la